HUYAN DE AQUÍ TODOS LOS QUE NO HAYAN VISTO EL CAPÍTULO FINAL
Y acabó.
Ahí lo llevas.
Aún estoy temblando.
Y es una sensación que me han producido muchas veces en estos 13 episodios. Muchas.
Empezando por el final, Aaron Paul se saca la polla y se mea en el 99% de los actores. El primer plano, al borde de las lágrimas, con el leve temblor en la mano, sin decir una palabra, mientras Gale suplica por su vida... Jesse cruza también la linea, la linea que Walt cruzó la semana pasada. Jesse es un buen tipo. Es un yonki, es un desastre, es egoísta, pero es buen chaval, todo lo buen chaval que se puede ser en esa situación. Matar a Gale le cuesta ser lo que es, le cambia para siempre, le saca de su papel y le mete en otra dimensión.
Que certeza creando la vida de Gale. En apenas dos escenas fueron capaces de hacer de él un ser humano, con su vida, con sus hobbies, con sus inquietudes, un buen hombre en el lugar equivocado, buen profesional, que ama lo que hace, que es todo neutralidad. Hemos visto morir a miles de personajes, y sabemos lo difícil que es para una serie (o peli) hacer que sintamos algo por la muerte de un secundario (terciario). Y lo de Gale no tiene nombre. La deriva moral de la serie vuelve a ponernos, a los espectadores, entre la espada y la pared. Es obvio que somos de Walt y Jesse pero, joder, nos lo ponen muy jodido para estar con ellos.
Heisenberg ha vuelto en toda su cruda inteligencia. Hay tres escenas en este último capítulo en las que se muestra que es mucho más list que, incluso, Mike y Gus, que Saul, que Skyler... que todos. La primera es en la reunión en el desierto; con una frialdad extrema expone a Gus la mejor solución posible para ambos, se está jugando la vida y, lo que es mucho más importante para él, toda su familia. Porque si antes teníamos claro que Walt haría lo que fuera por ellos, incluso perderlos, y eso significaba saltarse la ley, en esta tercera temporada tenemos claro que por cualquier cosa Walter entiende
cualquier cosa. Además, en otro de esos duelos al sol, como en los western, pasa eso tan brutal de que Gus le dice si le está preguntando si mandó matar al niño, y Walt, impasible, le mira diciendolo todo con los ojos pero asegurando que nunca le preguntaría eso, oh.
La segunda es la MAGNÍFICA, MARAVILLOSA escena de la empresa de recreativos, en la que por primera vez Saul ve que está por detrás del juego, que Mike no trabaja más que para Gus, y que Walter y Jesse le han metido en un problemón del quince; allí Walter suelta eso de "You know what we have to do" a la pregunta de Jesse. Y ellos lo sabían pero no el espectador, y no Gus tampoco. Porque Heisdenberg es más listo que todos nosotros, es más listo que Gus y va dos pasos por delante.
La tercera, por supuesto, es la capacidad para pensar un plan de salvación de camino a su ejecución. Lo mejor de esa última escena en la lavandería es la cara de Mike, que siempre está al mando de la situación, por primera vez en toda la serie se le ve aterrorizado, se le ve superado por Walt, algo que no le había pasado nunca. Y, por si no lo teníamos claro, sólo unos minutos antes nos habían mostrado como se las gasta con los miembros del cartel mexicano que han enviado para joder los transportes del negocio de meta de Gus. Pues ese mismo Mike ve, incrédulo, como Heisenberg ha dado en la tecla justa para salvar su vida y ponerle en una situación desconocida: el miedo a un tío superior, no físicamente, si no mentalmente.
Luego hay montones de pequeños detalles para analizar, ese "never to the DEA" de Walt a Jesse para no humillar a Hank (aún queda corazón dentro de Walt para los suyos), el guiño del joven Walt y la joven Skyler diciendo al vendedor que va a trabajar con láseres (XD)... y, por supuesto, la entrada nuevamente de los mexicanos para que la cuarta temporada tenga de todo.
Se acabó, y vaya como lo siento, se acabó una temporada tan magistral, tan increible, que ha hecho que una serie que, en mi opinión, era un top 5 de la historia de la tele pase a ser, de forma inmediata, mi favorita.
Gracias, Vince Gillian.
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Ibrahimovic es un fichaje extraordinario, lo tiene todo y hará al Barsa invencible-
Pepe Rodríguez
Busquets no tiene nivel como para jugar en la selección-
Pepe Rodríguez
Yo escogería a Michael Beasley antes que a Derrick Rose, tiene mucho más recorrido-
Pepe Rodríguez
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