Como he dicho en un mensaje anterior, esta gira daba mucho juego. Y más que no gustarme, me decepcionó. Eso no quiere decir que no me gustase, al contrario, pero yo esperaba otra cosa.
Después de los macromontajes de ZooTV y Popmart, en que el exceso era lo más notable, aquello era como dice Vox, una obra de teatro que va de ciudad en ciudad. Se repetía constantemente pero era causado porque el concepto del concierto daba pocos espacios a la improvisación.
Cuando llegó el Elevation, se anunció como una cosa completamente distinta. Que si soul, que si mas cerca de los fans, vuelta a las raices... chorradas de Bono, ya sabeis. Yo personalmente me lo imaginé como una especie de Lovetown, un escenario sin florituras, recintos pequeños, en la que U2 volvían al placer de tocar por tocar, una setlist cada noche, improvisaciones sobre la marcha... U2 lo podían hacer. Pero no. Una vez más, se programa el ya típico concierto de 2 horas, 20 canciones y de ahí no salimos. Ya podemos darnos con un canto en los dientes por haber tenido en Barcelona un concierto "tan" diferente a los del resto de la gira. En ese sentido fuimos ciertamente especiales. Me importa un pepino si Bono no tiene voz mientras lo den todo, y nos den detalles como ese concierto. Se podrá criticar el estado de Bono, pero nadie podrá negar que el concierto de Barcelona no fue emotivo. Porque yo voy a un concierto de U2, no voy a la ópera joder.
Todos los conciertos deberían haber sido como Barcelona, es decir, una base de 12-14 canciones y 6 improvisaciones cada concierto, un poco más de variedad. Esta vez no tenían toda la parafernalia de pantallas detrás como excusa.
Ese fue, en mi opinión, el gran defecto del Elevation tour.
Un saludo,
Diego