Después de 2 semanas en las que tanto dirigentes del Depor como jugadores han calentado a su afición para acrecentar su odio hacia el Valencia, empiezan a verse resultados: el autobús del Valencia acribillado a "huevadas" y los jugadores recibidos en el aeropuerto por un gran número de aficionados con insultos. A esto hay que añadir la pancarta en Riazor en el partido de ida que hablaba de "Rencor eterno". Y las declaraciones del deportivista Senel diciendo que la afición del Depor es más correcta que la del Valencia, con esto empiezan a quedar en evidencia.
Lo que más me jode es que todo viene por UN ñšNICO energúmeno que lanzó una moneda al linier. No fue el tí­pico partido en que cientos de aficionados lanzan cosas al campo, como ocurre lamentablemente en la mayorí­a de los estadios de vez en cuando y afortunadamente no suele pasar en Valencia.
Todo este odio viene generado SOLO por el Depor, dese aquel partido en que Djukic, que jugaba en el Depor, falló un penalti contra el Valencia y por ello no ganaron la liga. Desde entonces, los deportivistas odian al Valencia y a su afición, porque un jugador suyo falló un penalti. Y el odio no fue recí­proco, fue con los años en los que eramos mal recibidos, con insultos en las pancartas, lanzamientos de objetos desde la grada por GRAN PARTE DE LA AFICIÓN DEPORTIVISTA, no por uno solo, hasta un palo de una bandera, que podí­a haber herido a alguien.
Y el hipócrita de Lendoiro, en 1997 fue inhabilitado por un año, porque el depor fue sancionado por el lanzamiento de UNA MONEDA y él ya se saltó a la federación y acudió a los tribunales para que no sancionaran al Depor. Qué gracia tiene verlo ahora hacer lo mismo por todo lo contrario, y el ridí­culo que ha hecho.
Lo peor es que han pasado la eliminatoria por 2 penaltis inventados, y eso también es anti-fútbol. Hasta TODAS televisiones nacionales, que tanto se meten con el Valencia, afirmaron en sus noticias que no habí­a penalti. Ahora esperamos al partido, a ver si son tan "pací­ficos" como dicen, si hasta mataron a un aficionado de otro equipo hace unos años.
Por último decir que la afición valencianista es una de las más pací­ficas que hay en España, aunque algunos medios traten de mostrar lo contrario.