La verdad es que el humor ya lo pone alguien como Ibarreche con sus tonterias de politica-ficcion,o el mismo Arzallus con las majaderias que escupe dia si,dia no...el problema viene cuando se rasca un poco y ves que debajo de todas esas vacias palabras y proyectos de pais bananero hay una realidad diaria en el Pais Vasco que da poco margen a la sonrisa,mas bien al contrario.