Lo que está claro es que esa "nueva cinefilia" que parece haber entre algunos jóvenes (y no tan jóvenes) que desconocen por completo a los clásicos en mi opinión camina a la deriva.
Es imposible entender del todo a Quentin Tarantino, Judd Apatow, Paul Thomas Anderson, Joel y Ethan Coen, Sofia Coppola, David Fincher, M. Night Shyamalan, Robert Rodriguez, Kevin Smith o Steven Soderbergh sin haber visto antes el cine de George Cukor, Raoul Walsh, Jacques Tourneur, John Ford, Ernst Lubitsch, Billy Wilder, Roberto Rossellini, Howard Hawks, Charles Chaplin, Joseph L. Mankiewicz, Elia Kazan, Vicente Minnelli, Otto Preminger, Nicholas Ray, Alfred Hitchcock, Federico Fellini, David Lean, Fritz Lang...
Hay que revitalizar ese cine clásico, ese cine que figura para todos como una especie de mito fundacional... y hay que hacerlo para elaborar una especie de canon cinematográfico con referentes claros y precisos, como primer paso para el reconocimiento de un pasado al que remitirse para entender el presente.
De lo contrario, ¿cómo se puede saber todo del cine contemporáneo sin saber nada del cine clásico?
¿Qué nuevas generaciones de cinéfilos pueden surgir a partir de esta situación?
Pues unas generaciones de cinéfilos que estarán condenadas a vagar por un limbo en el que los puntos de referencia se hayan difuminado hasta tal punto que se llegue a perder toda perspectiva al respecto y se llegue también a la ausencia total de criterio a la hora de valorar una película.
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The boys are back again!!!!
Editado 1 vez/veces. Última edición el 06/01/2010 16:31 por Yomismo.
