No le conocía de su etapa en el Betis sino por el Mundial de Estados Unidos. Un día estando jugando en la playa se nos fue la pelota hasta su hamaca. Le pedí que me hiciera un autógrafo en la pelota, me preguntó que si tenía boli y le respondí que no. Yo tampoco -me dijo. Y ya está. Me fui así a las bravas, mosqueado con el nota por no llevar un boli encima.

Con el del gorrito de Amaral fue un periodo de tiempo irrisorio. Dieron un concierto por la zona y ya le habíamos visto antes en la barra del garito. Resulta que yo salía del WC y él entraba. Le dije 'eyy' o 'aay' ('qué hay' abreviado) y le di una palmada en la espalda. Él también hizo lo mismo. Luego recordé que no me había lavado las manos.

Y bueno, ya por esta zona me he encontrado con la fauna autóctona: Ismael Beiro, Andy y Lucas, Íñigo (el de la primera edición de GH). A éste último en 'Disfraces Pepi Mayo' con cara de estar muy perdido.

Ah, y jugadores de baloncesto por un tubo: Garbajosa, Gasol, Chichi Creus, Navarro, Felipe Reyes, Grimau, etc... pero con esos apenas hay anécdotas destacables.