Intensísima.... apocaliptica.... ominosa.... atmosférica..... genial!!! A mi juicio, la mejor canción de U2 tanto en contenido, musicalidad, pasión e intensidad.....
Esta es una canción que nace de la experiencia vivida por Ali y Bono en El Salvador, donde fueron testigos del bombardeo de una aldea por cazas del gobierno de turno.
La batería de Larry retoma la marcialidad que había dejado de lado después de Sunday Bloody Sunday, y se entrelaza con una línea de bajo tenebrosa de Adam, lo que otorga un ambiente rabioso. Esto, junto a las notas de guitarra de The Edge, que se disparan como misiles y metralletas, entregan un tétrico ambiente en vivo sobretodo, que es donde la canción luce en plenitud. Se siente en directo una musicalidad estruendosa, que rasga una oscuridad sangrienta.
La letra es una sucesión de imágenes apocalípticas que alcanza el clímax al final, cuando Bono se desprende de la simbología bíblica y las metáforas de fuego y usa por primera vez lo que sería un pseudo-rap para arremeter explicimamente (y con muchísimo desprecio) a los magnates del tráfico armamentista, y de paso denuncia la indiferencia de los ciudadanos ante las masacres cometidas en el tercer mundo.
Traduzco:
Con traje y corbata se acerca a mi, su cara roja
como una rosa de un arbusto espinoso
como todos los colores de un rubor regio.
Y está contando todos los dólares en billetes
(arrojándolos con fuerza)... CIEN!!!! DOSCIENTOS!!!
Y yo puedo ver a esos cazas de guerra
a través de las chozas de barro mientras los niños duermen
a través de los callejones de una calle en una ciudad tranquila
Escalera arriba hacia el primer piso
giramos la llave y lentamente abrimos la puerta
un hombre toca profundamente el saxofón.
A través de las paredes escuchamos a la ciudad bostezar
América está allí afuera....
Esta canción queda coja si no se escucha en vivo, pues ganan mucho los shows en dramatismo (en el LoveTown Tour, Bono agregaba unos versos adicionales mientras alumbraba al respetable; en el ZooTV Tour aparecían las cruces de fuego [burning crosses] que se transformaban en svasticas de fuego antes del solo de guitarra; en el Popmart Tour Bono ridiculizaba a un chaplinesco Fidel Castro; en el Elevation Tour [quizás la versión más similar al disco] con el monólogo alusivo a las matanzas, asesinatos sin sentido, y la intro con Charlton Heston; y en el Vertigo Tour con Bono torturado y vendado, cantando con una bengala al lado que produce un efecto post-batalla).
Esta canción solo una vez ha dejado de ser tocada en vivo (antes del Vertigo Tour, era la tercera canción más interpretada de U2 en los conciertos, después de Pride y I will follow, cosa que creo que cambió con la última gira), y fue en el primer recital de la tercera manga del Elevation Tour (primer atentado post Twin Towers). Siempre ha sido dramática en vivo, y a pesar de no haber sido nunca single, creo que es de las canciones que U2 nunca dejará de lado en sus conciertos.
