U2: el veredicto. Por John Meagher

Viernes 13 de febrero 2009

Se tomaron su tiempo, ¿no es así? Han sido cuatro años y tres meses desde el último álbum de estudio de U2 - la brecha más larga en la historia de la banda. A veces, este – álbum nº 12 - se podría haber llamado “No Finish On The Horizon” (Ningún final en el horizonte), tales fueron las aparentes dificultades y las inseguridades a las que se enfrentaron al hacerlo.

Inicialmente, Rick Rubin, el productor que ayudó a rejuvenecer la carrera de Johnny Cash y Neil Diamond, fue visto como el que podría llevar a la banda a emocionantes nuevas áreas. Pero esos períodos de sesiones, a partir de julio de 2006, no funcionaron y se volvió una vez más a los viejos amigos de confianza, Brian Eno, Daniel Lanois y Steve Lillywhite. Este último ha trabajado en y con la banda desde su álbum debut, Boy, los otros dos desde The Unforgettable Fire en 1984.

La grabación tuvo lugar en Marruecos, Nueva York, Londres y en su estudio de Hanover Quay de Dublín con unas 50 nuevas canciones grabadas. Todavía estaban haciendo retoques en las canciones, y en las secuencias de los títulos en Navidad, además de alimentar una línea de especulación: sufrían parálisis creativa, y no tenían la suficiente confianza para continuar.

Y las dificultades creativas parecían demasiado evidentes con el primer single Get On Your Boots. “¿Es esto?” Podías casi oír decir a los oyentes, cuando la canción se estrenó el mes pasado en 2FM. Sus insistentes guitarras difusas estaban bien, aunque la letra sin sentido es más difícil de digerir, pero ¿Dónde estaba la nueva y atrevida dirección que la banda y sus amigos nos habían prometido?.


Un cambio en la dirección tampoco se encuentra en el álbum. Para los oyentes, no seria empezar con mal pie como sucedió con Achtung Baby o incluso con Pop. Pero las sugerencias de que U2 han perdido su inspiración son infundadas - e injustas. No Line On The Horizon puede no ser una obra maestra, pero es sin duda una muy buena y fuerte de colección de canciones que puede igualar las ventas de sus dos grandes discos de esta década, All That You Can’t Leave Behind y How To Dismantle An Atomic Bomb. Incluso “Get On Your Boots” demuestra que funciona bien cuando la escuchas en el contexto del álbum.

Apenas tiene 54 minutos de duración y es uno de sus mayores esfuerzos. Y de las 11 pistas, sólo dos pueden ser descritos como birrias. Esa no es una mala jugada para los estándares de nadie.

Empieza con firmeza, con la canción que da título al álbum, “No Line On The Horizon“, una canción de rock para arrasar en los estadios que podría haber llegado de Kings Of Leon. Los jóvenes del sur han sido teloneros de U2 en la carretera, y claramente han tenido un impacto sobre Bono que misteriosamente suena igual que Caleb Followill en algunos momentos. Imitación, adulación y todo eso…

Es seguida continua con una de las destacadas del álbum, la acertadamente llamada “Magnificent”. Esto ya suena como un clásico de U2 que combina diferentes épocas de su carrera de una forma muy atractiva – War se encuentra con Zooropa-, si se quiere ver así. Incluso los más declarados anti-U2, es probable que luchen para tener razones para que no les gusten las guitarras de Edge y la ‘muscular’ sección rítmica. Es una de las dos canciones con los teclados de will.i.am y mientras que el principal hombre de Black Eyed Peas es apenas un teclista que te hace sentarte y tomar nota, la producción inteligente de Eno normalmente toma todos los elementos y prepara algo épico que dura cinco minutos y que la convierten en algo especial. Digamos que uno de sus más recientes “clientes”, Chris Martin de Coldplay, es probable que llore con envidia cuando la escuche.

No Line On The Horizon es, en su mayor parte, un álbum optimista. Hay varios momentos de euforia y un montón de alusiones a la redención. Canciones como “Moment of Surrender” [NOTA: Moment Of Salvation en el articulo original]- que, tiene más de siete minutos de duración, definitivamente se quedan más de lo debido- está cargada de referencias en la letra al ‘alma’, ‘Dios y fuego ‘. La atmósferica “Unknown Caller” está cortada por el mismo patrón. Vamos hacerle frente, sería muy difícil que fuera un álbum de U2, si Bono no estuviera comprometido con estos temas - y si eres uno de los muchos que encuentra este tipo de material fuera de lugar, la mayor parte del álbum, simplemente no te gustara.

Hay un montón de canciones que no tienen este efecto de división, sin embargo. “I’ll Go Crazy If I Don’t Crazy Tonight”, por ejemplo, es un número masivo edificante que será uno de los favoritos en vivo cuando U2 vaya a la carretera este verano. Hay humor también, como Bono hizo notar: “El derecho a parecer ridículos es algo que apreciamos”. Nunca fueron tan verdaderas estas palabras, Bono.

No es el único momento de auto desaprobación en el álbum. En “Stand up Comedy” podemos ver al cantante, que tiene la posibilidad de usar zapatos con alzas, cantando “Napolean in high heels” antes de ofrecer la línea ‘matadora’: “Be careful of small men with big ideas.” The Edge tocando una guitarra cruda y sucia - que tiene Queens Of The Stone Age escrito por todas partes. Pero la canción no cautiva. Parece un poco artificial.

La canción más intrigante del álbum es “Fez – Being Born” [NOTA: FEZ-Coming Home en el articulo original], que es un triunfo de la experimentación de Eno sobre el sonido de U2. (De hecho, Eno y Lanois comparten créditos como escritores en varias pistas.) Fue uno de los primeros temas grabados - durante los períodos de sesiones en la ciudad marroquí que le da su título a la canción - y es una pista sobre como este álbum podría haber sonado si la banda realmente hubiera arrojado su precaución al viento. Su intro de electro-ambiente nos muestra el sonido del canto de los pájaros y el bullicio de la vida de Marruecos (que aparentemente fue grabado al aire libre en el patio) y Bono hace referencia a la línea “let me in the sound” de Get On Your Boots, antes de que se disuelva en un rock que está en un territorio inesperado. Los cambios de tempo son sorprendentes y la canción cuenta con más audacia que la mayor parte de las otras canciones, que por todos sus méritos, simplemente carecen de ello.

Como mencioné al principio, un par de canciones no alcanzan el promedio de las demás. Una de ellas es Stand Up Comedy. La otra es “Breathe”, donde nos encontramos a Bono casi hablando, aunque la canción no hace lo suficiente para involucrar al oyente.

La lastimera “White As Snow” no tiene ese problema. Una de las pistas más lentas en el álbum, su introducción recuerda a Sigur Ros, mientras que, más tarde, un cuerno francés pone de relieve la evocadora letra.

Cerca, “Cedars of Lebanon“, es la canción más abiertamente política, y verdaderamente te gusta cada vez más. Al igual que muchos de sus hermanas en este álbum, su temperamental textura atmosférica recuerda a la era de Achtung Baby. Es una canción relajada para la conclusión de un álbum lleno de vida y esperanza.

No Line On The Horizon es poco probable que decepcione a los multitudinarios fans de la banda. No se han reinventado a sí mismos como han sugerido, sino que tocan sus puntos fuertes. Nuevas bandas de rock con ambiciones de llegar a los estadios podrían aprender una o dos cosas de este álbum.

Después de una larga y difícil gestación, el álbum se siente como un triunfo. No va a cambiar el mundo, pero otorga a Bono, The Edge, Adam y Larry un boleto para la dominación del mundo una vez más. Solo mira como llegan las cifras de ventas.

No Line On The Horizon será lanzado el 27 de febrero (Irlanda). El primer single Get On Your Boots se lanza hoy en formato físico


Your love was a light bulb/Hanging over my bed